De La Habana el cielo,
eso creo,
pero aún así, si tengo que elegir de entre todas las maneras de morirme de calor, elijo durmiendo contigo, mad-rugada mad-rileña, abrazada a tu canción alveolar y a tu promesa de verde.
He vuelto, me parece, ¿una cocacola en el Retiro?
jueves, 30 de julio de 2009
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3 comentarios:
o dos cocacolas y unas patatitas...
ya? ya?
besitos bienvienidaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
¿Calor? Tu no sabes lo que es la caló
Como no sea un tinto de verano en triana...
a mi me queda lejos el retiro, pero queria saludar desde la capital del progreso de America latina, Brasilia!!
beijinhos!
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